Salud

CNSS aplica sanción millonaria a SeNaSa por retrasos en pagos y refuerza supervisión del sistema de salud

El CNSS confirmó una multa de RD$ 1 888 902 a SeNaSa por retrasos en los pagos al Centro Policlínico Nacional, que habían sido impuestos por la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (Sisalril) en abril de este año, tras detectar que esas demoras constituían una conducta “omisiva” y repetida de la ARS estatal. 

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SeNaSa contestó esa sanción mediante un recurso de reconsideración ante la Sisalril, y luego elevó un recurso jerárquico al CNSS, alegando que el reglamento que sustentaba la multa no habría sido promulgado por el Poder Ejecutivo, sino solo aprobado por el Consejo. Argumentaban que la Ley 87‑01 que regula el sistema de seguridad social dominicano no facultaba al CNSS para emitir ciertos reglamentos sancionadores sin la promulgación formal. 

El CNSS, en su reunión del 31 de octubre, determinó que la resolución de la Sisalril se ajustó al principio de legalidad, y que el reglamento en cuestión sí se publicó en un periódico de circulación nacional y cumple los requisitos de entrada en vigor; por tanto, la sanción quedó firme. 

Según la Sisalril, no se trató de un hecho aislado, sino de un patrón prolongado de incumplimiento por parte de SeNaSa, que generaba riesgo para la estabilidad financiera de los prestadores de servicios de salud, y podía afectar el acceso de los afiliados a la atención médica. 

La sanción de RD$ 1.9 millones, aunque pequeña en comparación con los déficits mencionados, tiene valor simbólico importante: muestra que los organismos de supervisión están aplicando sanciones por incumplimientos administrativos, lo cual podría incrementar la presión sobre SeNaSa para mejorar su gestión, cumplimiento y transparencia.

Para los afiliados y prestadores, esto significa que hay una constancia de que los atrasos pueden generar consecuencias legales, pero también que la institución pública encargada de su cobertura afronta retos graves en su operatividad y finanzas. Expertos coinciden que si no se manejan esos déficits y se actualiza el modelo de financiamiento (especialmente en el régimen subsidiado), los problemas de cobertura, atrasos y calidad pueden intensificarse.

En conclusión, la sanción firme del CNSS contra SeNaSa representa tanto una señal de supervisión reforzada como un reflejo de las tensiones estructurales que enfrenta el sistema dominicano de salud pública. La atención se centra ahora en ver si las acciones correctivas y las inyecciones financieras lograran estabilizar la institución y garantizar el servicio óptimo a sus afiliados.