Salud

La enfermedad renal crónica es la novena causa principal de muerte en el mundo

Santo Domingo, RD — La enfermedad renal crónica (ERC) se ha convertido en un problema creciente de salud pública a nivel global, posicionándose actualmente como la novena causa principal de muerte en el mundo. Expertos en nefrología advierten que esta enfermedad afecta a millones de personas y que su detección temprana y manejo adecuado son esenciales para reducir la mortalidad y mejorar la calidad de vida de los pacientes.

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La ERC se caracteriza por la pérdida progresiva de la función de los riñones, lo que puede llevar a complicaciones graves como hipertensión, anemia, daño cardiovascular y, en casos avanzados, insuficiencia renal que requiere diálisis o trasplante. Entre los factores de riesgo más importantes se encuentran la diabetes, la hipertensión, antecedentes familiares de enfermedad renal y hábitos de vida poco saludables, como el consumo excesivo de sal y la obesidad.

Los especialistas señalan que la detección temprana de la enfermedad renal crónica es fundamental, ya que en sus etapas iniciales la enfermedad puede no presentar síntomas evidentes. Pruebas simples como análisis de orina, examen de creatinina en sangre y control de la presión arterial permiten identificar el deterioro de la función renal a tiempo, facilitando la implementación de tratamientos que pueden ralentizar la progresión de la enfermedad.

Además del control médico, los expertos recomiendan cambios en el estilo de vida para prevenir y manejar la ERC. Una alimentación balanceada, reducción del consumo de sal y azúcar, hidratación adecuada, ejercicio regular y la abstención de tabaco y alcohol son medidas que contribuyen a la salud renal. La educación y concienciación sobre los factores de riesgo son esenciales para reducir la incidencia y las complicaciones asociadas a esta enfermedad.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la mortalidad por enfermedad renal crónica ha aumentado en las últimas décadas, en gran parte debido al incremento de la diabetes y la hipertensión en la población mundial. Los expertos hacen un llamado a los gobiernos, instituciones de salud y sociedad en general a fortalecer programas de prevención, educación y acceso a atención especializada para enfrentar este desafío.

En conclusión, la enfermedad renal crónica representa un riesgo creciente para la salud global. La combinación de detección temprana, tratamiento adecuado y hábitos de vida saludables puede marcar la diferencia entre un manejo exitoso de la enfermedad y complicaciones graves que comprometan la vida de los pacientes.